Restricciones de los operadores, en particular de T-Mobile y sus subsidiarias, nos obligan a cambiar números o redirigir a las personas que llaman. Para que todos sus oyentes, sin importar su compañía telefónica, tengan acceso puede ser necesario cambiar su número. Dependiendo del operador, es posible que tengamos que cambiar este número cada semana, para otros operadores, hemos tenido el mismo número durante años.
Le damos un número que nunca cambia, pero algunos de sus oyentes, cuando llaman, pueden ser dirigidos a otro.